Soñar para vivir / Dream with the fishes, de Finn Taylor, es una cinta que fue rodada en 26 días. Dentro de este término de tiempo se creó un film dinámico, desparpajado, libre.
Con una realización que recuerda cintas road movie de los años 70, Taylor va hilando entre sí a varios personajes de lo más disímbolos. Pero todo gira alrededor de un par de –supuestos- hombres opuestos, que giran alrededor de una sola paradoja.
Por una parte está Terry. Este personaje pretende suicidarse sin tener el coraje para hacerlo. Aislado del mundo, encerrado en su oficina, su único escape es ser un voyeurista empedernido. A través de sus binoculares pretende conocer una realidad con la que se relaciona vicariamente.
El polo opuesto –y complementario- es Nick, un verdadero pícaro. Su primer contacto es un proceso de estafa y reclamo alrededor de unas pastillas para que Terry se suicide, y el reloj que sirve como pago.
A partir de esta oposición, Taylor recrea un mundo marginal donde gobierna el gusto por la vida, la aventura y las fantasías cumplidas. Nick tiene una enfermedad incurable y no quiere morir en un hospital sino en libertad. Terry puede vivir pero no tiene ningún deseo de hacerlo.
Esta segunda oposición de los personajes, de vida y muerte, de cobardía y arrojo, hace que los dos personajes firmenun pactopor unas cinco semanas. Cada quien ayudará al otro a cumplir fantasías irrealizadas mientras llega elmutuo final.
Pero la convivencia diaria hace que ambos modifiquen su conducta y se solidifique la amistad. Esto se debe a que ambos intercambian el conocimiento de sus mutuas debilidades al parejo que buscan alocadamente el cumplimiento de sus fantasías.
La primera de ellas, de Nick, es representativa de un estilo de vida, donde se realiza lo que se desea buscando no herir al Otro. Nick termina jugando boliche desnudo, acompañado por dos prostitutas. No hay un aire erótico en la escena sino un curioso sentimiento lúdico de libertad. Terry reacciona exactamente al revés: no acepta el cumplimiento real de sus fantasías eróticas. Mientras Nick busca amarrarse a la vida, Terry rechaza cualquier relación con la misma.
A lo largo de la cinta es Nick quien arrastra a Terry. Su vitalidad enfrenta una y otra vez al suicida potencial a la realización del sueño personal mientras el propio se apaga.
Con humor, en ocasiones negro, Taylor presenta situaciones picarescas donde ambos personajes escapan o se meten en más problemas –un asalto bancario, tatuajes, asalto a farmacia-, pero no deja por ello de dar tintes humanistas a ambos. Terry cumple dos de los deseos más profundos de Nick: el encuentro con una ex-novia, Mary, y su presencia en el hospital. Nick finalmente logra anclar a Terry a la vida y lo libera del mundo asfixiante de la solitaria visión voyeurista.
Una historia que se asoma a dos vidas humanas con el enfoque anarquista de los 70, donde no importa tanto el resultado de una vida –ganador / perdedor- sino la manera en que fue vivida.
También, al igual que algunos de los estilos cinematográficos que prevalecieron en dicha década, en momentos Soñar para Vivir se siente dispareja porque la realización no puede mantener el paso con la vitalidad que se quiere imprimir a la cinta. Frente a momentos un poco flojos hay magníficas secuencias –el asalto a la farmacia, por ejemplo-.
Lo que queda claro es que si vale la pena ver Soñar para vivir. De alguna manera se puede recuperar ese alocado espíritu anarquista de todos los Nicks que se han ido de este planeta, pero que de alguna manera sobrevive en todos los Terrys que aún están aquí…. Porque algo aprendieron uno del otro.
SOÑAR PARA VIVIR / DREAM WITH THE FISHES. Producción: 3 Rings Circus Films, Mitchell Stein, Johnny Wow, David Arquette, Jeffrey D. Brown. Dirección: Finn Taylor. Año:1997. Guión: Finn Taylor, basado en una historia propia y de Jaffrey D. Brown. Música: Tito Larriva. Edición: Rick LeCompte. Intérpretes: David Arquette (Terry), Brad Hunt (Nick), Kathryn Erbe (Liz), Cathy Moriarty (tía Elise), Anita Barone (Mary), Timi Prulhiere (Michelle), J. E. Freeman (padre de Nick). Duración: 97 minutos.
