Miguel Cane
La leyenda de Johnny Cash, cantante de country, influencia en el rock and roll, iconoclasta y “rebelde”, se construyó a lo largo de varias décadas y el principal colaborador para crearla fue él mismo. Posiblemente el ejemplo más notable de ella sea esta película dirigida por James Mangold (dirigió Inocencia interrumpida, Identity y la repelente Kate & Leopold), en la que su hijo, John Carter Cash – que funge como productor ejecutivo- nos presenta la historia de cómo su padre trascendió de una vida rural en Arkansas (con todos los elementos que uno supone: pobreza, padre frío y estricto, madre fanática religiosa y una tragedia íntimamente ligada a su infancia) al estrellato con llenos totales en Las Vegas, ventas millonarias de discos y un afán por autodestruirse con exceso de drogas y alcohol, sólo para ser redimido por el amor (que, si creemos lo que la película dice, parecía predestinado) que lo unió con June Carter, también cantante, que él admiró desde chiquillo.
La película, con una ambientación muy lograda – se desarrolla principalmente en los años 50 y 60-, en realidad sólo muestra una imagen muy parcial de su protagonista: sabemos que Johnny (interpretado vigorosamente por Joaquin Phoenix, aún si a veces sobreactúa con alarmante abandono) es un ser atormentado y complejo; esto es principalmente porque el guión, escrito por Gill Dennis y el director, basándose en las dos autobiografías del cantante, despacha cada cliché que uno se pueda imaginar: de este modo, la historia del amor entre él y June (Reese Witherspoon) parece ser “un triunfo sobre la adversidad”, aún si se trató de una situación más difícil e involucra, entre otras cosas, el que el matrimonio de Cash con Vivian Liberto, la madre de sus hijas (Ginnifer Goodwin, muy notable en un rol insufrible) tuviera mal final.
Aquí, la ex esposa es pintada como una perra y June, pese al adulterio, acaba casi como una santa, cosas que ambas mujeres ciertamente no eran, aunque, como en toda película biográfica reciente que se respete, hay que exacerbar el melodrama para beneficio del público que no estuvo presente, mas debe tener una versión de las cosas.
La Witherspoon es una actriz inteligente y aquí sale bien librada, al hacer que su interpretación de June Carter tenga un cariz de modestia y humanidad que son, de hecho, lo mejor de la película, donde Joaquin Phoenix “se posesiona” en algunas escenas (como en la que rompe un lavabo con las manos) y por ello resulta realmente irritante.
Al igual que en la no muy disímil Ray, que recibió los mismos reconocimientos el año pasado (de hecho, tienen tantas semejanzas argumentales que parecen cortadas por la misma tijera), la película tiene una impresionante banda sonora que no sólo incluye (y reproduce) grandes éxitos de Johnny Cash y June Carter, como “Jackson”, “Ring of Fire” o la cinta que da título original al filme, “Walk the Line”: también hay temas de Jerry Lee Lewis y Elvis Presley, quienes hicieron giras con ellos en su momento.
El detalle interesante aquí es que Mangold insistió en que, en vez de hacer el consabido playback, los actores interpretaran sus propios temas [Taylor Hackford hizo lo mismo con Jamie Foxx cuando éste encarnó a Ray Charles] y el resultado es curioso, ya que ambos cantan bien, aún si no consiguen imprimir el sello de los originales, que no eran grandes voces, pero derrochaban carisma en sus presentaciones – lo cuál les valió el éxito que tuvieron hasta sus muertes, casi simultáneas, en 2003.
Ostentando el bastante aburrido título en español de Johnny & June: Pasión y Locura (ciertamente seleccionado por el equipo de marketing para “hacerla accesible”a un público que no conoce a Johnny Cash, que fuera de ciertos círculos es virtualmente inédito aquí), la película ofrece exactamente lo que de ella se podría esperar: es una biografía arbitraria, pero entretenida, bien realizada y vistosa, con actuaciones consistentes en su mayor parte y mucha y buena música. Sin duda, el espectador que no conoce (o no le importa conocer) la leyenda del hombre de negro y la mujer que lo metió en cintura, estará más que satisfecho, pero no mucho más.
Johnny & June: Pasión y Locura / Walk The Line
Con Joaquin Phoenix, Reese Witherspoon, Ginnifer Goodwin y Robert Patrick.
Dirige: James Mangold
Distribuye: 20th Century FoxEstados Unidos, 2005