Retorno al Bosque de Sherwood
Miguel Cane
Cuando se da una buena dinámica de trabajo entre directores y actores, no es raro que se establezca una relación de trabajo entre ellos; así el neozelandés Russell Crowe vuelve a ponerse en las manos de su director de cabecera, Ridley Scott después de cuatro largometrajes juntos. Primero Gladiador (2000), seguida por la desastrosa comedia romántica Un buen año (2006), la excelente American Gangster (2007) y Red de mentiras (2008). Ahora se reúnen para contar una historia que ya nos es familiar: las aventuras de Robin de Sherwood, el noble rebelde convertido en ladrón para ayudar a los pobres aldeanos de Nottingham, quienes están sofocados por la ambición del Príncipe Juan y su 'achichincle', el Sheriff de la localidad, apoyándose en una banda de pintorescos personajes.
La película ha causado bastante especulación desde su anuncio, sobre todo, porque tuvo una producción muy accidentada – la legendaria Vanessa Redgrave, que originalmente interpretaría a la reina Leonor de Aquitania, se retiró del rodaje al fallecer repentinamente su hija Natasha Richardson, y luego, la caprichosa starlette Sienna Miller fue despedida tras haber criticado públicamente a Russell Crowe como viejo y gordo, lo que provocó un cambio drástico del guión y que fuera sustituida por Cate Blanchett- que no obstante logra su cometido, si bien es muy dificil que sea tan notable como aquella primera versión con Errol Flynn y Olivia deHavilland (muchos lectores jóvenes se preguntarán: ¿quiénes?), que aún hoy es la película de Hood por excelencia.
Con un 'look' medieval, poco se parece este Robin al que encarnó Kevin Costner en 1991 en la atroz Robin Hood: Príncipe de los ladrones, aquí, aunque hay humor y esta muy bien ejecutado, tambien hay una sensación de peligro, de violencia. Crowe, como Robin se asemeja bastante al Maximus en Gladiador, rebelde e iracundo, pero también muy cálido. Por su parte, la incomparable Cate Blanchett se pone en la piel de Lady Marian, ahora una mujer madura y viuda, que se enamora de él, dándole un giro interesante a la trama, que así rinde un homenaje a Robin y Marian (de Richard Lester, 1976) en la que Sean Connery y la inmortal Audrey Hepburn encarnaron a estos iconos en el ocaso de sus vidas.
La producción es notable, igual que el cuidadoso trabajo de locación. La recreación de la vuelta de los ingleses tras la cruzada de Ricardo Corazón de León está muy lograda y transporta al espectador a un momento que no tuvo manera de conocer, pero que se siente genuino, y eso en las fantasías históricas, es el aspecto más importante, cosa que logra con honores.
Scott se mantiene en forma, no pierde el ritmo y cuenta con un buen reparto, en el que completan el cuadro figuras como Mark Addy, William Hurt, la estupenda Eileen Atkins y el propio Max Von Sydow, en una aparición especial.
Tratándose de una película de verano, no exige mucho y tampoco ofrece demasiado: entretenimiento, adrenalina, humor, quimica entre personajes... básicamente el producto de Hollywood ideal para esta temporada, que, pese al talento involucrado, no implica necesariamente que sea una obra maestra, cosa que Robin Hood ni de lejos es.
Robin Hood/ Robin Hood
Con Russell Crowe, Cate Blanchett, Mark Addy, Matthew Macfadyen, Mark Strong, William Hurt, Danny Huston, Eileen Atkins y Max von Sydow
Dirige: Ridley Scott
Estados Unidos/Reino Unido 2010